Partiendo de las premisas de percepción sencilla de las sensaciones, los sentimientos y las emociones, haciendo una analogía de la expresión: “la experiencia tal y como se le da al observador de un modo directo”. (Köhler, Koffka y Sander, 1969) citado en (Martín, 2011). Considero iniciar este texto en el que la percepción está organizada. Tiende a ser buena con la ayuda de las situaciones del estímulo. La Gestáltica igual que la teoría de las necesidades, buscan el potencial humano, acompañada de un proceso normativo y centrado en el cliente (evolutivo) no en el paciente (enfermo).

Consecuente con lo anterior, el contacto fenomenológico en la terapia del aquí (tiempo) y el ahora (espacio) permite “darse cuenta” en la parte de la Gestalt (atención= aceptación). Esto facilita la capacidad de percibir lo que está sucediendo dentro de sí mismo y del mundo que me rodea. Vivirlo y no explicarlo, es decir, “per se” es curativo ya que el organismo tiende a su autorregulación; en otras palabras, en cada momento hará alusión a cada necesidad, impulsos y asuntos inconclusos. Es aquí donde la relación es más directa entre Maslow y Perls teniendo en cuenta que hacen parte de la misma tercera fuerza (Psicología humanística).

Somos nosotros mismos quienes a través del juicio previo limitamos nuestra conciencia considerando dentro de la polaridad elegir algún bando. Ejemplo: el día y la noche (el bien/recompensa y el mal/castigo. El dualismo en el ser humano es característico de nuestro modelo de aprendizaje conductual; no obstante, las interacciones de los polos funcionan como un proceso dialéctico de complemento y no como dos objetos diferentes. Por esto, somos un reflejo; como es adentro es afuera y como es afuera es adentro. Igual, con las circunstancias, las personas y la vida (cuerpo, alma y mente). Sin resistirnos sino dejando fluir, en coherencia con la intuición. Todo esto, en aras del auto-conocimiento, satisfacción (autorrealización de Maslow/autentico en diferentes términos) volverse un todo, autosuficiencia y auto-apoyo movilizarte en la Gestalt y en la teoría de las necesidades, para pasar al siguiente estado jerárquico de la pirámide, y obtener la completa felicidad, en el aquí y el ahora, sin considerar limitaciones, sino por el contrario aceptando los benéficos recursos que posee. La psicología humanista es un todo, en consecuencia, se ve inseparable e integrado en la terapia conversacional o centrada en el cliente. En mi parecer, es un complemento no una contraposición.

Referencia

1. Martín, Á., & de la Rosa, C. R. (2011). Manual práctico de psicoterapia Gestalt. Desclée de Brouwer.